Ir al contenido principal

Entradas

Una gran multitud que nadie podía contar (Ap 7,9.14b-17)

Domingo 4º de Pascua – C. 2ª lectura 9 Después de esto, en la visión, apareció una gran multitud que nadie podía contar, de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas, de pie ante el trono y ante el Cordero, vestidos con túnicas blancas, y con palmas en las manos. Entonces uno de los ancianos intervino y me dijo: —Éstos que están vestidos con túnicas blancas, ¿quiénes son y de dónde han venido? 14b —Señor mío, tú lo sabes —le respondí yo. Y me dijo: —Éstos son los que vienen de la gran tribulación, los que han lavado sus túnicas y las han blanqueado con la sangre del Cordero. 15 Por eso están ante el trono de Dios y le sirven día y noche en su templo, y el que se sienta en el trono habitará en medio de ellos. 16 Ya no pasarán hambre, ni tendrán sed, no les agobiará el s...

Dios lo resucitó al tercer día (Hch 10,34a.37-43)

Domingo de Resurrección –  1ª lectura 34a Pedro comenzó a hablar: 37  »Vosotros sabéis lo ocurrido por toda Judea, comenzando por Galilea, después del bautismo que predicó Juan:  38  cómo a Jesús de Nazaret le ungió Dios con el Espíritu Santo y poder, y cómo pasó haciendo el bien y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.  39  Y nosotros somos testigos de todo lo que hizo en la región de los judíos y en Jerusalén; de cómo le dieron muerte colgándolo de un madero.  40  Pero Dios le resucitó al tercer día y le concedió manifestarse,  41  no a todo el pueblo, sino a testigos elegidos de antemano por Dios, a nosotros, que comimos y bebimos con él después que resucitó de entre los muertos;  42  y nos mandó predicar al pueblo y atestiguar que a él es a quien Dios ha constituido juez de vivos y muertos.  43  Acerca de él testimonian todos los profetas que todo el que cree en él recibe po...

Resurrección de Jesús. El sepulcro vacío (Lc 24,1-12)

Vigilia Pascual – C. Evangelio 1 El día siguiente al sábado, todavía muy de mañana, llegaron al sepulcro llevando los aromas que habían preparado; 2 y se encontraron con que la piedra había sido removida del sepulcro. 3 Pero al entrar, no encontraron el cuerpo del Señor Jesús. 4 Estaban desconcertadas por este motivo, cuando se les presentaron dos varones con vestidura refulgente. 5 Como estaban llenas de temor y con los rostros inclinados hacia tierra, ellos les dijeron: —¿Por qué buscáis entre los muertos al que está vivo? 6 No está aquí, sino que ha resucitado; recordad cómo os habló cuando aún estaba en Galilea 7 diciendo que convenía que el Hijo del Hombre fuera entregado en manos de hombres pecadores, y fuera crucificado y resucitase al tercer día. 8 Entonces ellas se acordaron de sus palabras. 9 Y al regresar del sepulcro anunciaron todo esto a los once y a todos los demás. 10 Eran María Magdalena, Juana y María la de Santiago; también las otras que estaban con ellas c...