24º domingo del Tiempo ordinario – C. Evangelio   1 Se le acercaban todos los publicanos y pecadores para oírle. 2 Pero los fariseos y los escribas murmuraban diciendo:  —Éste recibe a los pecadores y come con ellos.  3 Entonces les propuso esta parábola:  4 —¿Quién de vosotros, si tiene cien ovejas y pierde una, no deja las noventa y nueve en el campo y sale en busca de la que se perdió hasta encontrarla? 5 Y, cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso, 6 y, al llegar a casa, reúne a los amigos y vecinos y les dice: «Alegraos conmigo, porque he encontrado la oveja que se me perdió». 7 Os digo que, del mismo modo, habrá en el cielo mayor alegría por un pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no tienen necesidad de conversión.  8 ¿O qué mujer, si tiene diez dracmas y pierde una, no enciende una luz y barre la casa y busca cuidadosa...