Ir al contenido principal

La misión apostólica (Mc 6,7-13)

 

15º domingo del Tiempo ordinario – B. Evangelio

7 Y llamó a los doce y comenzó a enviarlos de dos en dos, dándoles potestad sobre los espíritus impuros. 8 Y les mandó que no llevasen nada para el camino, ni pan, ni alforja, ni dinero en la bolsa, sino solamente un bastón; 9 y que fueran calzados con sandalias y que no llevaran dos túnicas. 10 Y les decía:
—Si entráis en una casa, quedaos allí hasta que salgáis de aquel lugar. 11 Y si en algún sitio no os acogen ni os escuchan, al salir de allí sacudíos el polvo de los pies en testimonio contra ellos.
12 Se marcharon y predicaron que se convirtieran. 13 Y expulsaban muchos demonios, y ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban.

Comentario a Marcos 6,7-13

Tras estar un tiempo con Jesús, los Doce son enviados a evangelizar. Esta misión debe entenderse a la luz del envío a todas las gentes (Mc 16,15-18), de la que es como un anticipo, y teniendo presente la predicación de Cristo (Mc 1,14-15), de la que es un eco. Hay varias notas que son comunes a los tres pasajes: como Jesús, que recorre caminos y aldeas enseñando (v. 6), los Apóstoles no deben quedarse en un sitio sino ir de uno a otro lugar (vv. 10-13; cfr 16,15); como en el caso de Cristo, la acogida será desigual: unos los aceptarán y otros los rechazarán (vv. 10-11; cfr 16,16); también los Apóstoles reciben la potestad que Jesús tiene sobre los demonios (v. 7; cfr 16,17), etc.

Con todo, en el pasaje se destaca en especial el desprendimiento de todas las cosas: «Tanta debe ser la confianza en Dios del que predica —dice San Beda— que ha de estar seguro de que no ha de faltarle lo necesario para vivir, aunque él no pueda procurárselo; puesto que no debe ocuparse menos de las cosas eternas, por ocuparse de las temporales» (In Marci Evangelium, ad loc.). Sin embargo, como ya anotó San Agustín, «el Señor no dice en este precepto que los anunciadores del Evangelio no puedan vivir de otro modo que de lo que les den aquellos a quienes lo anuncian, sino que les da poder de obrar así, haciéndoles saber que tienen derecho a ello; de otra manera, el Apóstol [San Pablo] habría obrado contra este precepto, al querer vivir del trabajo de sus manos» (S. Agustín, De consensu Evangelistarum 2,30,73).

En el sumario final San Marcos recoge la unción con óleo a los enfermos (v. 13). La Iglesia ve «insinuado» en este gesto el sacramento de la Unción de los enfermos, instituido por el Señor, y más tarde, «recomendado y promulgado a los fieles por Santiago apóstol (cfr St 5,14ss.)» (Conc. de Trento, De Extrema Unctione, cap. 1).

Comentarios

Entradas más visitadas de este blog

Dios vendrá y nos salvará (Is 35,1-6a.10)

Domingo 3º Adviento - A. 1ª lectura 1 ¡Que el desierto y la tierra árida se alegren, que se goce la estepa y florezca como las azucenas ! 2 Florezca pujante y alégrese con gozo y cánticos de júbilo. Se le ha dado la gloria del Líbano , la gala de Carmelo y del Sarón , ellos verán la gloria del Señor, la majestad de nuestro Dios. 3 Fortaleced las manos débiles, y consolidad las rodillas que flaquean. 4 Decid a los pusilánimes: «¡Cobrad ánimo, no temáis! Aquí está vuestro Dios, llega la venganza, la retribución de Dios. Él vendrá y os salvará». 5 Entonces se abrirán los ojos de los ciegos y se destaparán los oídos de los sordos. 6a Entonces el cojo saltará como un ciervo, y la lengua del mudo gritará de júbilo. 10 Regresarán los redimidos del Señor, llegarán a Sión con gritos de júbilo e infinita alegría en sus rostros, traerán regocijo y alegría, y desaparecerán la pena y los lamentos. Comentario a Isaías 35,1-10 En este capítulo de Isaías se pres...

Mirad, la virgen está encinta (Is 7,10-14)

Domingo 4º Adviento - Primera lectura. 10 Y el Señor siguió hablando a Ajaz: 11 —Pídele al Señor, tu Dios, un signo, en el fondo del seol o en lo alto del cielo. 12 Pero Ajaz dijo: —No lo pediré y no tentaré al Señor. 13 Entonces respondió: —Escuchad, casa de David : «¿Os parece poco cansar a los hombres para que canséis también a mi Dios? 14 Pues bien, el propio Señor os da un signo. Mirad, la virgen está encinta y dará a luz un hijo, a quien pondrán por nombre Enmanuel . Comentario a Isaías 7,10-14 Las palabras de la lectura se enmarcan en un encuentro entre Isaías y el rey Ajaz, en el que el monarca se debate en la duda de qué postura tomar ante las presiones que recibe para que su reino se incorpore a la coalición antiasiria formada por Israel (aquí también llamado ­ Efraím ) —cuya capital era Samaría — y por Siria —cuya capital era Damasco —. De Tabeel (o Tabeal) (v. 6) no se conoce más de lo que aquí se dice. Quizá fuera un alto funcionario, dispuesto a seguir...

Alégrate, llena de gracia (Lc 1,26-38)

Inmaculada concepción – Evangelio 26 En el sexto mes fue enviado el ángel Gabriel de parte de Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, 27 a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David. La virgen se llamaba María. 28 Y entró donde ella estaba y le dijo: —Dios te salve, llena de gracia, el Señor es contigo. 29 Ella se turbó al oír estas palabras, y consideraba qué podía significar este saludo. 30 Y el ángel le dijo: —No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios: 31 concebirás en tu seno y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. 32 Será grande y será llamado Hijo del Altísimo; el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, 33 reinará eternamente sobre la casa de Jacob y su Reino no tendrá fin. 34 María le dijo al ángel: ...