Comentario a 2 Reyes 4,42-44
Baal-Salisá estaba situada a unos 25 km. al oeste de Guilgal. Puesto que el pan de las primicias estaba destinado a Dios (cfr Lv 23,17-18) aquel hombre se lo ofrece a Eliseo como profeta del Señor; pero éste, dada la carestía existente, quiere compartirlo. Es probable que esos cien hombres pertenecieran a los círculos proféticos con los que vivía Eliseo. Eliseo da la orden de repartir el pan, a la vez que pronuncia el oráculo que ha recibido de Dios (v. 43), y el prodigio se realiza.
También Jesucristo obrará el milagro de multiplicar los panes, y lo hará asimismo tras la objeción de los Apóstoles parecida a la que leemos en el v. 43 (cfr Mt 14,20; 15,37 y par.). Pero Jesús realiza el milagro por propia iniciativa y alimenta a muchísimas más personas.
Comentarios