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Textos para la Vigilia Pascual y el Domingo de Resurrección

Haciendo click en cada línea con la referencia bíblica se puede acceder al texto completo y a los comentarios sobre las lecturas de la Vigilia Pascual y de la Misa del Domingo de Resurrección Vigilia Pascual Primera lectura: Gn 1, 1-2, 2. Vio Dios todo lo que había hecho, y era muy bueno Segunda lectura: Gn 22, 1-18. El sacrificio de Abrahán, nuestro padre en la fe Tercera lectura: Ex 14, 15-15, 1 a. Los hijos de Israel entraron en medio del mar, por lo seco Séptima lectura: Ez 36, 16-17a.18-28. Derramaré sobre vosotros un agua pura, y os daré un corazón nuevo Octava lectura: Rm 6, 3-11. Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no muere más Evangelio: Mc 16,1-7. Jesús el Nazareno, el crucificado, ha resucitado Domingo de Resurrección Primera lectura: Hch 10,34a.37-43. Dios lo resucitó al tercer día  Segunda lectura: Col 3,1-4. Buscad las cosas de arriba Evangelio: Jn 20,1-9. Los lienzos en el sepulcro vacío

Los lienzos en el sepulcro vacío (Jn 20,1-9)

Domingo de Resurrección – Evangelio 1  El día siguiente al sábado, muy temprano, cuando todavía estaba oscuro, fue María Magdalena al sepulcro y vio quitada la piedra del sepulcro.  2  Entonces echó a correr, llegó hasta donde estaban Simón Pedro y el otro discípulo, el que Jesús amaba, y les dijo: —Se han llevado al Señor del sepulcro y no sabemos dónde lo han puesto. 3  Salió Pedro con el otro discípulo y fueron al sepulcro. 4  Los dos corrían juntos, pero el otro discípulo corrió más aprisa que Pedro y llegó antes al sepulcro.  5  Se inclinó y vio allí los lienzos plegados, pero no entró.  6  Llegó tras él Simón Pedro, entró en el sepulcro y vio los lienzos plegados,  7  y el sudario que había sido puesto en su cabeza, no pleg...

Buscad las cosas de arriba (Col 3,1-4)

Domingo de Resurrección – 2ª lectura 1  Así pues, si habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios;  2  sentid las cosas de arriba, no las de la tierra.  3  Pues habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.  4  Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces también vosotros apareceréis gloriosos con él. Comentario a Colosenses 3,1-14 Por el Bautismo el cristiano participa de la vida gloriosa de Jesucristo resucitado. Por eso, Cristo debe llenar todos los horizontes de su vida. «Mi amor está crucificado (...). No me satisfacen los alimentos corruptibles y los placeres de este mundo. Lo que yo quiero es el pan de Dios, que es la carne de Cristo, nacido de la descendencia de David, y no deseo otra bebida que su sangre, que es la caridad incorruptible» (S. Ignacio de Antioqu...