Ir al contenido principal

Les ha brillado una luz (Is 8,23b-9,3)

3º domingo del Tiempo ordinario – A . 1ª lectura
23 Pero no habrá más tinieblas
donde había angustia.
Así como en el tiempo primero menospreció la tierra de Zabulón y la tierra de Neftalí, en el tiempo postrero honrará el camino del Mar, al otro lado del Jordán, la Galilea de los gentiles.
1 El pueblo que caminaba en tinieblas
vio una gran luz,
a los que habitaban en tierra de sombras de muerte,
les ha brillado una luz.
2 Multiplicaste el gozo,
aumentaste la alegría.
Se alegran en tu presencia
con la alegría de la siega,
como se gozan al repartirse el botín.
3 Porque el yugo que los cargaba,
la vara de su hombro,
el cetro que los oprimía,
los quebraste como el día de Madián.
Comienza a hacerse presente, aún entre sombras, la figura del rey Ezequías, que a diferencia de su padre Ajaz, fue un rey piadoso que confió totalmente en el Señor. Después de que Galilea fuera devastada por Teglatpalasar III de Asiria, con la consiguiente deportación del pueblo que vivía allí (cfr Is 8,21-22), el rey Ezequías de Judá reconquistaría esa zona, que recobraría su proverbial esplendor durante un cierto tiempo. Estos sucesos abrieron de nuevo paso a la esperanza.
Esa reconquista efímera de Galilea realizada por Ezequías ha sido vista sólo como anuncio de la definitiva salvación realizada por Jesucristo. San Mateo ve en el comienzo del ministerio de Jesús en Galilea (Mt 4,12-17) el cumplimiento de este oráculo de Isaías (cfr 8,23-9,1): las tierras que en tiempo del profeta se encontraban devastadas y a las que los asirios habían llevado gentes extranjeras para colonizarlas, han sido las primeras en recibir la luz de la salvación del Mesías.

Comentarios

Entradas más visitadas de este blog

Mirad, la virgen está encinta (Is 7,10-14)

Domingo 4º Adviento - Primera lectura. 10 Y el Señor siguió hablando a Ajaz: 11 —Pídele al Señor, tu Dios, un signo, en el fondo del seol o en lo alto del cielo. 12 Pero Ajaz dijo: —No lo pediré y no tentaré al Señor. 13 Entonces respondió: —Escuchad, casa de David : «¿Os parece poco cansar a los hombres para que canséis también a mi Dios? 14 Pues bien, el propio Señor os da un signo. Mirad, la virgen está encinta y dará a luz un hijo, a quien pondrán por nombre Enmanuel . Comentario a Isaías 7,10-14 Las palabras de la lectura se enmarcan en un encuentro entre Isaías y el rey Ajaz, en el que el monarca se debate en la duda de qué postura tomar ante las presiones que recibe para que su reino se incorpore a la coalición antiasiria formada por Israel (aquí también llamado ­ Efraím ) —cuya capital era Samaría — y por Siria —cuya capital era Damasco —. De Tabeel (o Tabeal) (v. 6) no se conoce más de lo que aquí se dice. Quizá fuera un alto funcionario, dispuesto a seguir...

Alégrate, llena de gracia (Lc 1,26-38)

Inmaculada concepción – Evangelio 26 En el sexto mes fue enviado el ángel Gabriel de parte de Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, 27 a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David. La virgen se llamaba María. 28 Y entró donde ella estaba y le dijo: —Dios te salve, llena de gracia, el Señor es contigo. 29 Ella se turbó al oír estas palabras, y consideraba qué podía significar este saludo. 30 Y el ángel le dijo: —No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios: 31 concebirás en tu seno y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. 32 Será grande y será llamado Hijo del Altísimo; el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, 33 reinará eternamente sobre la casa de Jacob y su Reino no tendrá fin. 34 María le dijo al ángel: ...

Dios vendrá y nos salvará (Is 35,1-6a.10)

Domingo 3º Adviento - A. 1ª lectura 1 ¡Que el desierto y la tierra árida se alegren, que se goce la estepa y florezca como las azucenas ! 2 Florezca pujante y alégrese con gozo y cánticos de júbilo. Se le ha dado la gloria del Líbano , la gala de Carmelo y del Sarón , ellos verán la gloria del Señor, la majestad de nuestro Dios. 3 Fortaleced las manos débiles, y consolidad las rodillas que flaquean. 4 Decid a los pusilánimes: «¡Cobrad ánimo, no temáis! Aquí está vuestro Dios, llega la venganza, la retribución de Dios. Él vendrá y os salvará». 5 Entonces se abrirán los ojos de los ciegos y se destaparán los oídos de los sordos. 6a Entonces el cojo saltará como un ciervo, y la lengua del mudo gritará de júbilo. 10 Regresarán los redimidos del Señor, llegarán a Sión con gritos de júbilo e infinita alegría en sus rostros, traerán regocijo y alegría, y desaparecerán la pena y los lamentos. Comentario a Isaías 35,1-10 En este capítulo de Isaías se pres...